El santuario de Kashima -Kashima Jingû -, en la prefectura de Ibaraki, es uno de los dos santuarios Shintô consagrados a las artes marciales.
Los orígenes de Kashima Shin ryû nacen de un rito exorcista conocido con el nombre de “harai-tachi”; fundado sobre la base de una demostración del manejo del sable, en honor a la divinidad “Takemikazuchi-no-Mikoto” venerada en el Kashima Jingû. Según la leyenda, Kuninazu-no-Mahito, desarrolló la técnica trascendiendo el combate físico, ejecutado con un espíritu de absoluta imparcialidad y de rectitud moral. Este arte marcial se conoce bajo el nombre de “Kashima-no-tachi – el sable de Kashima.”
Al orígen, en el siglo XVI, los guerreros del templo de Kashima utilizaban los nombres de Kashima Chuko Nen-ryû, Chuko-ryû o Nen-ryû para designar a las escuelas asociadas a las tradiciones marciales de este santuario.
Matsumoto Bizen-no-kami Ki no Masamoto (1467-1524 o 1543), cuya familia se ocupaba del sacerdocio del Gran Templo de Kashima, fué alumno de Iizasa Chosai Ienao, el fundador del Tenshin Shoden Katori Shintô-ryû, otra inminente escuela de la que se inspira par crear el Ichi-no-Tachi (el sable único). Reputado por el manejo del sable, Matsumoto Bizen había puesto a punto un sistema que él mismo había enseñado a varios guardas del Santuario de Kashima, y que también transmitió a sus descendientes.
Actualmente, tres escuelas tradicionales llevan el nombre del Santuario Shintô: “Kashima Shin ryû”, que hace referencia a la nueva formulación de las tradiciones marciales de Kashima, creado por Matsumoto Bizen-no-kami; ”Kashima Shinden Jiki Shinkage ryû” (o Jiki Shinkage ryû) también del mismo Matsumoto Bizen, y dónde el prefijo del nombre confirma su afiliación a Kashima; y “Kashima Shintô ryû” de la familia Yoshikawa. En 500 años de historia, las 19 generaciones de grandes Maestros y guerreros han guardado, celosamente, los secretos de esta prestigiosa institución, al mismo tiempo que hacían evolucionar las artes marciales.
PARA QUIEN?
Por su naturaleza, la escuela Kashima Shin ryû puede ser practicada por todos, sin distinción. El KenJutsu, disciplina educativa por excelencia, permite de expresarse plenamente. Desde la iniciación a los entrenamientos avanzados, el control del cuerpo, del ritmo, de la actitud, de la coordination de los movimientos y desplazamientos en el espacio, son enseñados durante toda la progresión de los practicantes. Es el descubrimiento de los principios técnicos, dinámicos, de contacto y de equilibrio.
CON QUIEN?
Con Gildo Mezzo, profesor de la escuela Kashima Shin ryû desde hace más de 20 años, y que dirige los entrenamientos . Regularmente viaja a Japón para estudiar y enriquecer sus conocimientos en el Shiseikan dojô (Meiji jingu,Tokyo) con Me Inaba Minoru, Me Araya Takashi, Me Udagawa Tetsuya.